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Entre las muchas alternativas que se consideran como infalibles para mejorar el trabajo de marketing SEO de una marca, tenemos los enlaces internos. Parece ser que después de los contenidos, el arma más poderosa a la hora de conseguir el mejor lugar dentro del buscador Google son tus enlaces. Sin embargo todos se enfocan en los externos, cuando dentro de la web hay que tener también una buena estructura.

La razón es bastante sencilla de entender: gracias a los enlaces internos, nosotros tenemos el control para  establecer  relaciones entre aquellas URLs que aportan mayor riqueza semántica a los temas por los que nos interesa escalar el posicionamiento.

Si además, esas conexiones que nos esforzamos en crear, son rastreadas, indexadas y comprendidas por el buscador de Google tal y como nosotros hemos pensado que debe ser, el efecto sobre nuestra posición en el índice de búsqueda será mucho mejor.

Mejorando mis enlaces internos

Empecemos por entender de qué va este asunto, un enlace interno o interlink, es una técnica mediante la cual, las páginas de un sitio WEB se conectan entre sí a fin de establecer clara y concienzudamente la arquitectura de la información que ofrece, con el preciso objetivo de posicionar ciertas URLs de interés para el sitio.

  • Lógicamente es parte de la intrincada estructura de vínculos que da personalidad a una WEB con respecto a la percepción que de ella se haga Google.
  • Básicamente el buscador interpreta que todos las URLs que la conforman están temáticamente conectados entre sí y, entre ellos, identifica cuales son aquellas cuyo contenido es relevante.  Ese trabajo le permite al buscador señalar las fuentes de interés comunes a usuarios y a buscadores.

Para lograr que esta conjunción de actividades se dé, es importante entender que nada en la WEB se hace solo, y que la inteligencia artificial solo funciona después de haber recibido ciertas ayudas. Por lo tanto, hay que tener presente que debemos ayudarla a entender nuestros mecanismos de creación de interlinks mediante algunos sencillos “trucos” que responden a problemas que han sido estudiados y resueltos con acciones como estas:

1.      Cantidad de enlaces

No pongas más de 4 enlaces en cada página, sobre-optimizar el texto con enlaces internos logrará lo contrario a lo que te has propuesto alcanzar.

2.      Los errores 404

Asegúrate de no enlazar errores 404. Nada es más perjudicial ya que  ese tipo de enlaces le resta credibilidad a tu página WEB ante Google, que es quien debe tener la mayor seguridad de que tu sitio es serio.

3.      Arquitectura informática

Trabaja en la arquitectura informativa de tu sitio WEB de manera coherente y clara, creando contenido que aporte valor y que deje muy claro el tipo de contenido que pretendes resaltar.

4.      Herramientas

Por último,  utiliza tus propias herramientas: el menú principal suele ser el mejor sitio para incluir las secciones destacables. El footer es uno de los más potentes y olvidados recursos de enlaces y, no menosprecies la importancia del URL del HTML de tu mapa WEB.

No hay reglas matemáticas exactas, desafortunadamente, pero después de conocer las particularidades de funcionamiento de los buscadores podemos establecer técnicas que funcionen a favor del posicionamiento.

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